Madrid, 25 jun (PL) El líder del partido progresista Podemos, Pablo Iglesias, se ofreció hoy como mediador para ayudar a recuperar los cauces de diálogo entre los gobiernos de España y Cataluña, rotos durante la administración conservadora de Mariano Rajoy.
En una rueda de prensa tras reunirse con el presidente catalán, el independentista Quim Torra, Iglesias aseguró que la agrupación antiausteridad contribuirá a la distensión mediante un diálogo sin condiciones entre la próspera región y el Estado español.
«Hay que terminar con la excepcionalidad, con las cárceles y con la judicialización de la política», reivindicó el secretario general de la tercera fuerza política del país europeo, quien anunció su voluntad de visitar a los líderes separatistas encarcelados.
A su juicio, la primera medida para destensar la situación debe ser precisamente el acercamiento de los nueve dirigentes presos a cárceles de Cataluña, aunque aclaró que se trata de una cuestión que atañe a los jueces.
En esa línea, afirmó tener constancia de que el nuevo presidente del Gobierno español, el socialista Pedro Sánchez, desea esa aproximación de los políticos secesionistas a prisiones catalanas.
Durante su comparecencia en Barcelona, sede de la Generalitat (ejecutivo regional), Iglesias opinó que la monarquía, al igual que la derecha española, jugó «un papel muy torpe y de desunión» en el conflicto catalán, al negar el reconocimiento de la plurinacionalidad.
No se entiende España sin este reconocimiento, que debe sustentarse en los «valores republicanos», enfatizó el máximo dirigente de la formación de izquierda.
Estos valores, que contemplan la fraternidad, la modernidad y la justicia social, no son para revivir el pasado sino para construir el futuro, subrayó.
Al asumir las riendas de esta nación ibérica el 1 de junio, tras ganar en el parlamento una moción de censura contra Rajoy con el crucial apoyo de Podemos, Sánchez se mostró dispuesto a tender puentes con la rica comunidad autónoma nororiental.
La reunión de Iglesias y Torra es la primera que mantiene el mandatario separatista con el líder de un partido de ámbito nacional, desde su elección al frente de la Generalitat, el pasado 17 de mayo.
Precede, además, a la que celebrará el 9 de julio con el socialdemócrata Sánchez en el gubernamental Palacio de La Moncloa en Madrid.